Láminas

Láminas galvanizadas y galvalume

Existen dos tipos de recubrimientos metálicos utilizados; galvanizado que utiliza 100% de zinc en varios espesores dependiendo del uso del producto y Galvalume, una mezcla de aluminio y zinc.
Estos recubrimientos metálicos se «sacrifican» para proteger de la oxidación cuando se exponen al aire y la humedad. El zinc es un metal más «activo» que el hierro, por lo que se oxida primero y forma una barrera protectora.
El aluminio proporciona la resistencia a la corrosión tanto atmosférica como por altas temperaturas, y una muy buena reflectividad térmica; el zinc aporta la formalidad y la protección galvánica (catódica) que protege las áreas perforadas o cortadas de la lámina.
Los brillantes de zinc formados en la superficie de la lámina galvanizada en continuo por inmersión en caliente se denominan “flor”. En Perfiltecxa manejamos la lámina en 3 tipos de material: Galvanizado estándar, Zinc Alum y Pintro.

Para evitar filtraciones, así como ayudar al funcionamiento como diafragma es importante efectuar un cosido en el traslape longitudinal. En este trabajo se colocarán tornillos autotaladrantes de exposición exterior adecuados para unir la lámina con otra lámina. Se recomienda usar un sellador de caucho butílico o elástico a base de poliuretano.

Lámina R-72

Perfil R72 es un producto acanalado de forma trapezoidal, su peso es ligero además tiene una gran aplicación tanto en techos como en muros. Se puede fabricar en medida especial hasta 7.32 m.

Lámina R-101

La lámina R101 es un producto acanalado de forma trapezoidal. Los calibres 22 y 20 se realizan bajo pedido. Se puede fabricar en medida especial hasta 12m.

Lámina R-101

La lámina Pintro es una lámina galvanizada con un recubrimiento de pintura en línea continua. Es un acabado con el cual la lámina de acero queda aún más protegida contra la corrosión y obtiene la belleza del color. Es el recubrimiento ideal para usos estéticos arquitectónicos, que a la vez brinda una mayor protección contra la corrosión de la lámina.

Posee una alta flexibilidad en su acabado, la cual la protege de agrietamientos al ser rolada o formada.

Por su resistencia a la corrosión y sus pinturas muy resistentes a la decoloración la lámina.

Requiere de muy poco o ningún mantenimiento, perdurando su tonalidad por un tiempo mucho mayor que las pinturas convencionales.

Se pueden realizar medidas especiales dependiendo el proyecto.